domingo, septiembre 13, 2009

Lo de Cobos visto desde afuera, es patético pero para el futuro del país, es grave…

Estuve leyendo una breve historia de los presidentes y vices argentinos desde mediados del siglo XIX hasta hoy y no pude encontrar nada que se parezca a la situación actual del poder ejecutivo nacional.
Históricamente, los vices fueron compinches (¿cómplices?) del primer mandatario. Lo cual es lógico, ya que la constitución prevé tres poderes que se controlan recíprocamente, pero no establece ningún mecanismo de control entre el presidente y el vice porque los dos forman parte del mismo poder ejecutivo.
Es más, el vice está allí para que, en caso de ausencia del primer mandatario, el poder ejecutivo sea representado frente a los otros poderes respetando la línea política que la ciudadanía votó.
Además, es sabido que cuando hay un problema grave que afecta la línea política o económica del gobierno en función, se remplaza el poder ejecutivo (presidente y vice) por un miembro del poder legislativo como una manera de impulsar un cambio significativo en las orientaciones políticas hasta las próximas elecciones presidenciales. (No me refiero a problemas que pudieran afectar exclusivamente al presidente).
Visto de esta manera, el rol de Cleto Cobos es anti constitucional, no en la letra de la constitución pero si en el espíritu de nuestra carta magna. En ese sentido su rol actual está desvirtuando la función para la cual fue concebido el cargo de vicepresidente.
Estuve buscando (aunque no de manera exhaustiva) un antecedente en otras democracias y si bien no puedo afirmar categóricamente que nunca sucedió, creo que es algo excepcional (si alguien encuentra información le agradeceré me la haga llegar para profundizar mi análisis).
Puedo asegurar que si algo así ocurriera aquí en Canadá, el funcionario o político con postura disidente al partido por el que fue elegido, comenzaría por renunciar a su partido o grupo político –lo cual implica que debe salir de todos los cargos recibidos- y luego formaría su propio espacio político con total libertad de expresión, pero desde afuera.
Insisto, renunciaría y no porque lo echen sino porque sabe que si no renuncia comete un acto inmoral frente a la sociedad. Legalmente y sobretodo éticamente, es imposible pensar que alguien pudiera hacer lo que está haciendo Cleto en estos momentos.
Debe ser por eso que a diario debo tratar de explicar con mucha dificultad a los canadienses que me preguntan, qué es lo que pasa con el poder ejecutivo en Argentina. Y cuando digo con mucha dificultad es porque no logro explicarlo y la situación les causa asombro y risa (lo cual quiere decir algo así como “es un pueblo de locos”, “¿cómo pueden permitir eso?”).
Para los anti K y los pro-Cleto (más o menos las mismas personas), les aclaro que la reacción de la gente no tiene ningún contenido político porque no conocen todos los pormenores de la política Argentina, la reacción se basa en consideraciones puramente éticas y legales sobre la base de lo que se conoce en el mundo de las democracias.
En las últimas semanas se agregó otro capítulo a la historia de este vice argentino: resulta que ahora es un perseguido político…
Si trato de explicar esto a los canadienses se me desmayan de risa.
No solo que éticamente está en pecado, no solo que viola el espíritu de la constitución sino que además al hacerlo sería victima de persecución y su libertad de expresión estaría coartada…
Permítanme una analogía: A nosotros nos gusta el fútbol, del bueno, entonces imaginemos un club que ha comprado un jugador a otro club, supongamos que es un defensor de buen calibre.
El técnico organiza el equipo y distribuye las posiciones a cada jugador y el equipo sale a la cancha.
En medio del partido, este defensor de buen calibre que ocupa el centro de la defensa, decide por su cuenta que no está de acuerdo con las directivas del técnico y que él va a jugar a su manera favoreciendo al equipo adverso (tal vez recibió alguna compensación económica importante), digamos que se mete a patear contra su arco metiendo goles en contra.
¿Quién de todos ustedes estaría dispuesto a felicitar a este jugador…? Evidentemente, los hinchas del otro equipo estarán locos de contentos.
¿Quién de todos ustedes estaría dispuesto a avalar ese tipo de comportamiento de un jugador de fútbol?
Espero que ninguno, a menos de ser un partidario del fraude y la corrupción.
¿Qué equipo aceptaría de contratar a ese jugador sabiendo que se puede dar vuelta en cualquier momento?
Espero que ninguno.
¿Quien aceptaría que ese jugador se presente como víctima de su técnico después de lo que acaba de hacerle al equipo?
Espero que ninguno a menos de ser alguien con comportamientos similares.
Puedo afirmar que la carrera futbolística de ese defensor se termina allí.
(No quiero seguir con la analogía pero podría agregar que un jugador que hace algo así tiene los minutos contados, a menos de esconderse bien lejos)
El Cleto, no solo traicionó a su equipo, no solo marcó goles en contra, no solo se presenta como víctima, sino que además es solicitado por otros equipos…
Es allí donde lo que está pasando con el cargo de vice se transforma en algo grave para el país.
Que un tal comportamiento sea ensalzado por un grupo de la ciudadanía para otorgarle un poder de decisión importante a alguien que no tiene palabra honorable, que usufructúa de un poder que no le pertenece y que no respeta el trabajo del equipo para el cual fue contratado, habla de un problema de ética grave en nuestra sociedad.
Tengo una firme esperanza en que a la hora de decidir la población sepa identificar estos comportamientos inmorales para poner el voto en otro lado, pero no puedo evitar preocuparme por el futuro inmediato de mi país cuando veo que la memoria a corto y mediano plazo no funciona. Como si la sociedad estuviera afectada de senilidad precoz.
Mientras tanto trataré de explicar lo que pasa a los canadienses sin que se me rían…

2 comentarios:

  1. ¡Bravo Guillermo!, tu pensamiento es una clonación de nuestros propios pensamientos, no podemos pensar de otra manera, es natural que el canadiense no entienda como no lo entendemos muchos de nosotros. Esto es posible en la literatura kafkiana y en el realismo mágico de García Márquez, somos hijos de esas realidades, ¡¡ellos no inventaron nada nuevo!! Este artículo es muy bueno, y seguramente se verá reflejado en un periódico de Venado Tuerto. Con tu permiso...
    Cristina desde VT

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  2. Soy un ex-venadense, y leí tu comentario (experiencia) sobre la incomprensión de los Canadienses, acerca del "divorcio", entre un Presidente y su Vice.
    Deberías recordarle, que ambos, compartieron formula en un "Frente" (Transversal), para lograr una "Victoria".
    Deberías comentarles a los Canadienses, que en un Frente o Alianza (de distintas facciones políticas), éstas, (las politicas), deben consensuarse, cosa que NO ocurrió,(El Kirchnerismo, "fagocitó" a sus "aliados "frentistas"), con lo cual, y atento el caríz de los acontecimientos a los que se llegaba por entonces (Ciudadanía movilizada, y muy polarizada), era realmente "preocupante".
    A tal punto, que luego de varias "Deserciones" de legisladores (senadores) que conformaron el Frente Par la Victoria, el voto de Cobos, fué el ÚLTIMO.......nadie recuerda los senadores (Justicialistas )que "antes" habian ya votado en CONTRA de aprobar la resolución 125 ???
    Explicale "ESO a los Canadienses.
    NO POR ESTAR LEJOS, SE TIENE UNA VISIÓN MÁS OBJETIVA..........
    (QUE HAY ACERCA DEL SUBYACENTE ESPIRITU SECESIONISTA, ENTRE FRANCO-CANADIENSES Y ANGLO-CANADIENSES ??....ESO NO ES TAMBIÉN "HABAS COCIDAS" ???)
    Así que....que NO se asombren tanto.
    Slds..

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